JOZEF TISO: EL MONSEÑOR OLVIDADO DE ADOLF HITLER
(Por: Ricardo Antonio Cuadra García)
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso y Adolf Hitler.
Adolf Hitler saluda a Monseñor Jozef Tiso, Jefe del Estado Eslovaco y Sacerdote Católico, en medio de la Batalla del Frente Oriental en octubre de (1941). (Fotografía Contemporánea, Siglo XX).
El análisis de la historia de la Segunda Guerra Mundial no deja de sorprendernos, no sólo por los horrores de la misma sino por el nivel de encubrimiento de algunos de sus responsables. Como es el caso del Arzobispo de Zagreb, Croacia Alojzije Stepinac (1937-60), quien colaboró con la Ustacha de Croacia en las masacres de serbios ortodoxos (más de 800000). El Gobierno Yugoslavo de Tito lo juzgó y lo condenó a 14 años de prisión y después lo liberó. El Papa Pío XII (Eugenio María Giovanni Pacelli) lo nombró Cardenal por sus excelentes servicios a la Iglesia y el Papa Juan Pablo II lo declaró Beato creando el rechazo de los serbios sobrevivientes del Holocausto de Ante Pavelic.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso y el Nazismo.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso y Adolf Hitler.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso y Joachim von Ribbentrop, Ministro de Asuntos Exteriores de la Alemania Nazi (Tercer Reich)..
El caso más notorio de encubrimiento histórico es el de Monseñor Jozef Tiso, Presidente de Eslovaquia entre los años (1939) y (1945). La vida y obra del sacerdote católico Jozef Tiso nos la describe muy bien documentada el escritor, historiador y jurista alemán Karlheinz Deschner en su obra “La Política de los Papas del siglo XX” en el Vol. II. El Vaticano abogaba por una desmembración de la República Checoslovaca a la cual consideraba muy socialista; por ello siempre apoyó al Partido Popular Eslovaco liderado por el Sacerdote Católico Andrej Hlinka y a partir de (1938) por Jozef Tiso. Al ser Jozef Tiso nombrado Primer Ministro de Eslovaquia en (1939), de inmediato proclamó la independencia de Eslovaquia, por lo cual fue destituido y tuvo que irse al exilio; a los brazos de Adolf Hitler. Con el apoyo de Adolf Hitler, Jozef Tiso regresó triunfante a Eslovaquia como Presidente de un Estado Independiente, pero “títere” del Gobierno Nazi Alemán.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso y el Nazismo.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso y el Nazismo.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso y el Nazismo.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso y el Nazismo.
El Papa Pío XII fue uno de los primeros en reconocer al nuevo gobierno de Tiso, mandándole un representante Diplomático y posteriormente recibiéndolo en el Vaticano. Pío XII le otorgó el título de Gentil-Hombre Papal y el título de Monseñor. Por su parte, Jozef Tiso proclamaba: “el catolicismo y el nacionalsocialismo tienen mucho en común y trabajan mano a mano por la mejora del mundo”. Jozef Tiso imitando a la Juventud Hitleriana, organizó la “Guardia de Hlinka” calcada a su homóloga alemana.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso y el Nazismo.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso y el Nazismo.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso y el Nazismo.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso y el Nazismo.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso y el Nazismo.
Monseñor Jozef Tiso promulgó una nueva constitución de corte “clero-fascista”, donde un código hebreo legislaba la discriminación de los 80,000 judíos que tenía Eslovaquia en ese momento. Se suprimió de inmediato la libertad de opinión, de prensa y de expresión y también los partidos políticos y se atribuló a los ortodoxos, protestantes y judíos. A estos últimos se les prohibió tener propiedades inmobiliarias y se les confiscó las que tenían; el Obispo Católico Jan Vojtasac se apoderó de las propiedades de éstos en Betlanovice y Baldovice el (25 de marzo de 1942), según nos informa el historiador Carlo Falconi en su libro “El Silencio de Pío XII”. También no les permitían trabajar en puestos públicos ni ejercer ninguna carrera liberal. Tampoco podían participar en deportes y actos culturales. Fueron excluidos de las escuelas y las universidades y obligados llevar la estrella amarilla de David imitando a Pío IX en los ghettos judíos en los Estados Pontificios en el s. XIX; también imitado por Adolf Hitler en el Tercer Reich (Alemania Nazi).
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso.
Pero el culmen del antisemitismo católico de Jozef Tiso llegó en (1942), cuando deportó hacia los campos de concentración y exterminio nazis a más de 60000 judíos, para lo cual Jozef Tiso pagó a Adolf Hitler 500 marcos por cada uno de los judíos para que fueran exterminados en el Campo de Concentración y Exterminio de Auschwitz. Mientras mandaba a los judíos al exterminio, Jozef Tiso manifestaba “Por lo que concierne a la cuestión judía, algunos se preguntan si lo que estamos haciendo es cristiano y humanitario. Mi pregunta es ésta: “¿Es cristiano el que los eslovacos quieran liberarse de sus eternos enemigos, los judíos? El amor a nuestro prójimo es mandamiento de Dios. El amor a éste me obliga a eliminar todo cuanto quiera causar daño a mi prójimo”. Es obvio que para Jozef Tiso los judíos no eran sus prójimos, pensamiento muy católico hasta ese momento.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso.
Monseñor Jozef Tiso en pago a su mecenas Adolf Hitler, prestó su territorio a la división 14 del ejército nazi alemán para la guerra de Polonia, y su buen “padrino” le dio a cambio 722 km2 de ganancias territoriales. Monseñor Jozef Tiso mientras fue Presidente de Eslovaquia, no dejó de ejercer su magisterio eclesiástico y daba misa con regularidad en su parroquia, al mismo tiempo que visitaba y alentaba a las tropas del Frente del Este contra Rusia (ant. URSS, Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas). Esto lo hizo hasta los últimos momentos, pues el (27 de septiembre de 1944) dijo: “Eslovaquia resistirá al lado de las potencias del eje hasta la victoria final”. Y más tarde manifestó con emoción “Sólo Alemania, como portaestandarte de las ideas sociales más progresistas, es capaz de satisfacer las aspiraciones sociales de todas las naciones”.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso.
Sacerdote Católico Andrej Hlinka.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso.
Sacerdote Católico y Presidente de Eslovaquia Monseñor Jozef Tiso.
Algo importante para destacar del Gentil-hombre del Papa, Tiso, es que puso a disposición de Adolf Hitler sus 3 divisiones de 50000 hombres cuando Alemania invadió Rusia (ant. URSS, Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas), poniendo en más evidencia cómo un supuesto subordinado del Papa XII tomaba partido por las potencias del eje Roma-Berlín-Tokio, obviando la supuesta neutralidad Vaticana.
Guardia Hlinka.
Guardia Hlinka.
Para algunos historiadores el Vaticano se mantuvo ajeno a los atropellos del régimen clerofascista de Monseñor Jozef Tiso, pero la pasividad de Pío XII fue su mayor complicidad. Esta pasividad provocaba no pocas contradicciones dentro del alto clero católico cercano al Papado. El historiador Alemán Hans Jacob Stehle ha expuesto una carta muy reveladora fechada en (1942) por Monseñor Doménico Tardini, quien fue secretario de estado de Juan XXIII. La carta en lo medular dice lo siguiente “Podemos entender que la Santa Sede no esté en condiciones de influir sobre Adolf Hitler, pero ¿quién puede comprender que no sea capaz de detener a un sacerdote?”. Sin embargo, “la situación eclesiástica era normal en la república de Eslovaquia, precedida por el sacerdote católico Jozef Tiso”, informaba el Manual de Historia de la Iglesia en su edición de (1970). (Karlheinz Deschner)
Jozef Tiso, cuando los soviéticos invadieron Eslovaquia en (1945), quiso huir a Austria, pero fue interceptado, encarcelado y llevado a juicio por el nuevo Gobierno de Checoslovaquia. En (1947) fue declarado culpable y sentenciado a la horca. Por más que el Vaticano pidió clemencia, el Presidente Checo no cedió y fue ahorcado en (1947). Cada vez es más obvio al revelar estos acostumbrados encubrimientos históricos de la Iglesia Católica, de qué lado estaba en la Segunda Guerra Mundial. Pero también es notable su destreza, que aún perdiendo la guerra con su aliado natural ideológico Adolf Hitler, haya ganado la Paz y sin el menor ápice de remordimiento, rehuyendo el juicio de la historia y sobre todo, los Juicios de Nuremberg (1946). Pero no entendemos la soberbia de quien se autoproclama Santa, al no ver las causas reales de por qué los templos católicos de Europa cada vez están más vacíos de creyentes y llenos si…pero del eco de la culpa y la impunidad.
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ResponderEliminarHacen falta miles y millones de Jozef Tiso. !!!!!
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